interiorismo badalona

En el centro de Badalona encontramos este piso de 130m2 con grandes ventanales con vistas al mar.
La conceptualización del proyecto de interiorismo era crear una gran caja blanca con el parquet de madera natural de roble como protagonista y eje principal en toda la vivienda. Donde los colores y materiales de cada estancia le aportan carácter y singularidad a los espacios.

Al entrar para hacer la medición inicial y el levantamiento de planos de estado actual encontramos un piso oscuro, con toda su carpintería de madera oscura y un estado desfasado debido a sus más de 40 años de antigüedad. La cocina verde oscura, las paredes estucadas y los cristales vidriados amarillentos.

Por esta necesidad de luz y claridad, el concepto incial y leif motiv del proyecto desde su inicio fue la de crear una gran caja blanca que rebotara la luz hasta todos los rincones junto con un pavimento natural de color claro y la carpintería de madera blanca lacada con puertas correderas hasta el techo. Suprimiendo las puertas innecesarias que separaban los recibidores y pasillos distribuidores.

FECHA
  • Marzo 2016
LUGAR
  • Barcelona
CLIENTE
  • Particular
CATEGORÍA
  • Vivienda alquiler

La doble altura existente en el gran espacio de salón-comedor marcó la distribución del mismo, ubicando una gran zona de comedor con una gran mesa de madera de teka maciza y las sillas Charles Eames. El escalón ciego existente se convirtió en una gran pieza de piedra natural Zimbawe negra con iluminación inferior oculta para crear un ambiente cálido a la zona de estar.

En la gran suite, se escondía detrás de un gran bloque de armarios el baño. Estos fueron derribados para abrir el baño al dormitorio separándolo mediante una gran puerta corredera de cristal translúcido que da intimidad en cada ambiente según sus necesidades.

Otra necesidad de sus habitantes era contar con una gran zona de teletrabajo con mucho almacenaje. Para lograr un espacio amplio y con capacidad para varias personas, se derribó parcialmente la pared separadora de dos habitaciones creando así un gran espacio de trabajo con vistas al mar y que a su vez se pudiera independizar mediante otra gran puerta corredera lacada en verde.

En esta singular vivienda de carácter desenfadado, es destacable la combinación de mobiliario, desde piezas de diseño como las sillas Eames Plastic, diseño de Charles y Ray Eames, la butaca Butterfly o el sofá de Joquer, que se complementan con El gran armario de un antiguo tornero encontrado en Antique Boutique y todo siempre mezclado con piezas low cost de Ikea.